Durante los últimos días se vienen produciendo en la ciudad de La Plata sucesivos desalojos de personas en terrenos, asentamientos y barrios populares.
Los mismos se llevan adelante mediante operativos extremadamente violentos y órdenes de desalojo al menos dudosas, a partir de los cuales muchos vecinos y vecinas de los barrios de Gorina, La Cumbre y Cementerio se encontraron sin lugar donde vivir.
Incluso, el juez en lo Contencioso Administrativo local, Luis Arias, afirmó que el desalojo de los terrenos ubicados en 141 y 478 respondió a “una causa penal armada por otros intereses, ya que la gente permanecía en el lugar con el consentimiento de dueño del predio”. Arias dijo que “en esta situación no existió delito, por que la gente permanecía ahí con el consentimiento de la Provincia , mediante Ferrobaries”. El juez realizó una denuncia contra los efectivos policiales que se negaron a cumplir con su orden judicial de no realizar el desalojo y, además, reclamó sanciones administrativas contra funcionarios del Ministerio de Seguridad bonaerense, que pudieran haber tenido responsabilidad en dicha situación.
Al mismo tiempo, muchos vecinos y vecinas de otros barrios se encuentran en alerta ante las amenazas de sufrir también el desalojo y la destrucción de sus viviendas.
Es llamativo que esto ocurra días después de sancionado el nuevo Código de Ordenamiento Urbano, que habilita la construcción de barrios privados en la periferia de nuestra ciudad.
En este marco, el Estado Municipal parece más preocupado por la “vivienda” de quienes más tienen recursos en lugar de resolver los gravísimos problemas de tierra y vivienda que existen históricamente en nuestra ciudad, ante el cual los sucesivos intendentes y Concejos Deliberantes miraron siempre para el costado.
Hoy, no sólo se mira para otro lado (mas allá de declaraciones para la galería del Concejo), sino que se avanza en habilitar que los barrios circundantes de La Plata se llenen de countries privados… ¡ya sabemos quienes sufrirán estas medidas!
Ante una situación económica cada vez más crítica, donde la inflación golpea con fuerza el bolsillo de los sectores populares, los vecinos y vecinas de los barrios más humildes deben sufrir además la incertidumbre de no tener donde vivir.
Exigimos que se detengan los desalojos y que el Municipio implemente, de una vez por todas, una política tendiente a solucionar los problemas de tierra y vivienda de los sectores populares de la capital provincial.
Esto, además, debería ser complementado con planes de vivienda llevados a cabo por cooperativas compuestas por los mismos vecinos y vecinas, para poder brindar así trabajo a miles y miles de platenses que, sin saber por qué, pagan los platos rotos de las internas del Partido Justicialista y se ven excluidos del Programa Argentina Trabaja.
Mariano Marini – Maia Luna – Lourdes Guardia Yamamoto
MOVIMIENTO BARRIOS DE PIE – LA PLATA
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